Comprar o elaborar bolsas de organza: Ideas

Como sabemos, las bolsas de organza son sumamente necesarias para empacar bisutería, joyas y pulseras ya que no solo sirven como estuche para dichos accesorios, sino que también

dan más elegancia y buena presentación.

Si bien las bolsas de organza son fáciles de conseguir en estilos y colores muy variados  en las tiendas de abalorios baratos, para las personas apasionadas por las manualidades, o para quienes quieren elaborar sus propias creaciones y darle su toque personal, hacer sus propias bolsas de organza suena como una buena idea.

Estas prácticas bolsas, además de ser tan bonitas, ayudarán a tener todo más organizado, ya que a diferencia de otras bolsas elaboradas en materiales frágiles, no se rompen fácilmente y pueden utilizarse una y otra vez, además su elaboración es bastante sencilla.

¿Que necesito para hacer bolsas de organza y cómo hacerlas?

Los materiales que utilizarás

Tela: escoge la tela de organza que más te guste o que vaya más con lo que necesitas, no te limites en tu imaginación, las telas vienen en muchos colores y texturas

Cuerda o cinta: la cuerda debe ser un poco más larga que  la boca de la bolsa que vas a elaborar, para un manejo más fácil. Procura que esta sea de un color parecido al de la organza, o que sea un poco más oscuro para dar realce. Hay quienes se atreven a mezclar colores diferentes y logran combinaciones interesantes.

Alfileres: los utilizarás para sujetar las piezas de organza al momento de coser

Hilo y aguja: el hilo debe ser del mismo color de la bolsa para que casi no se note la costura.

Tijeras: son necesarias para elaborar cada uno de los cortes

Vela o mechero encendido: con el fuego, podrás eliminar todos los excesos de hilos colgantes para dar perfección a tu creación y para que además la bolsa de organza no se dañe.

Regla: para tomar las medidas, que serán de acuerdo al tamaño que necesites.

Gancho o alambre doblado: lo necesitarás para pasar la cuerda por dentro de la bolsa.

Procedimiento:

Toma las medidas y recorta dos cuadros iguales (recomiendo curvear los extremos de abajo), sujeta las piezas con alfileres y cose los bordes, dejando uno o dos centímetros sin coser en uno de los extremos de arriba (parte que queda abierta) dependiendo del grosor de la cuerda que vayas a usar. Luego, haz como en forma de un dobladillo o túnel que es por donde pasará la cuerda ajustable y ya casi está, ahora lo que necesitas es usar el fuego para eliminar las pelusas sobrantes e introducir la cuerda, y ya está lista tu bolsa de organza. Con esta base, puedes agregarle los elementos que quieras para personalizarla.

Ya sabes cómo hacer una bolsa de organza, la verdad es un procedimiento bastante sencillo, pero casi nunca es necesario hacerlas  ya que se pueden conseguir prácticamente para todo. Si lo prefieres, puedes conseguirla en grandes cantidades y ya elaboradas, todo es cuestión de necesidades y preferencias